Estimados Regantes del Río Maipo:
La Asociación de Canalistas representada por quien suscribe, viene en exponer el siguiente tema de máxima relevancia para todos nosotros.
En los últimos 11 años, hemos sido golpeados por la sequía más profunda de la que se tiene registro. Esto no solo ha perjudicado nuestras cosechas, sino que ha dejado en evidencia la falta de infraestructura y de mecanismos eficientes que nos permitan manejar la cuenca y asegurar que el agua disponible sea suficiente para todos.
Las lluvias y la nieve de este invierno nos están dando un pequeño respiro pero no nos garantizan que, en la próxima temporada de riego o los años venideros, nuevamente nos veamos en la disyuntiva de cómo redistribuir el agua. Las pérdidas de la temporada fueron significativas, nuestros huertos sufrieron por la falta de agua, afectando la cantidad y la calidad de los alimentos producidos.
Estamos conscientes que la prioridad es el consumo humano, aunque creemos que la sanitaria debe fomentar con más fuerza el uso consciente del agua cuando hay escasez como la vivida, pero es nuestro deber decir que la producción de alimentos es también una actividad esencial que no puede ser sacrificada con un decreto de escasez, sobre todo cuando existe la tecnología para que las empresas utilicen otras fuentes, como las subterráneas, que le permitan sortear estos años extraordinarios sin menoscabar la producción de alimentos. Es importante destacar que la sanitaria de la RM pierde una cantidad muy relevante de agua por las características o antigüedad de sus redes. Hoy lo que hace falta es voluntad de trabajar en conjunto y asegurar nuestros derechos de aprovechamiento de agua para la producción de alimentos.
La Junta de Vigilancia que nos agrupa es la que debe velar por un reparto equitativo y proporcional de las aguas. Lamentablemente, nuestro sector de canalistas y regantes no ha contado con una voz única dentro de esta. Y como resultado las empresas sanitarias de la RM han llegado a utilizar el 80% de las aguas del río Maipo, sin efectuar ningún esfuerzo de reducción de las pérdidas, fomento al ahorro ni de uso de fuentes alternativas. Es la Junta de Vigilancia la que nos debe representar ante la autoridad e impulsar una forma de trabajo que incluya a los sectores público, privado y, en particular a la sanitaria para buscar acuerdos que sean equitativos sin sacrificar el sector agroalimentario.
Los invitamos a sumarse con sus asociaciones respectivas a una agenda común, para buscar soluciones a corto, mediano y largo plazo, que nos asegure el riego de nuestros campos, que además de ser nuestra tierra y nuestra fuente laboral, es el lugar en que se producen las frutas, hortalizas y cultivos que alimentan a millones de personas del país y así cumplir nuestro rol de productores de alimentos.
Nuestra meta es tener un gran objetivo común: contar con el agua necesaria para que nuestro sector pueda seguir aportando alimentos y fuentes de trabajo.
Atentamente,
Luis Baertl Jourde Presidente Asociación Canales de Maipo
